sábado, febrero 25

Teorias de babel

Yo soy de las que creen que se puede tener un mínimo de control ante cualquier situación. Que se puede siempre optar hacia derecha o izquierda, y que si te lo propones no tienes por que hacer algo. No dejo espacio a la cobardía, ni a los impulsos. Esa soy yo. Me propuse no prometer nunca nada que no tuviera intención de cumplir, que se acabarían las frases que se sueltan en esos momentos en los que no pensamos en nada más. Y lo voy a cumplir. No puedo dejar de odiar momentos en los que dije que iba a estar, y luego yo misma zanjé la forma de hacerlo. Me hace sentir falsa, haber prometido tantas cosas en abrazos dados desde tan dentro. Ahora tengo mi control, mi mentalidad, mis teorías de babel, que en mil idiomas intentan sostener los cimientos de algo que quizás no tengan fuerza a aguantar. Pero son mis leyes, y por ellas me levanto cada día, después de 3 o 4 horas de viajes a mundos oscuros. Y me da igual que nadie más crea en ellas, de sobras se que en este camino no voy a encontrar con quien sentarme a mirar las estrellas. Quien no espera, no se desilusiona.

Promesas rotas



Escuchando: El útlimo de la fila - Insurrección (si era.. siiiiii!)



Retales de mi vida
fotos a contraluz